El espectáculo
Cuando vamos como espectador a ver cualquier espectáculo de la índole que sea, vamos simplimente con los sentidos abiertos para disfrutar.
Pero... ¿Qué pasa del otro lado? ¿Cómo estructuro mi espectáculo.
Pues no es que haya una regla escrita en letras de oro en el libro sagrado del bailarín, si no que cada uno hace lo que quiere y "buenamente" puede. Aunque existe una estructura "típica" para shows de bellydance.
PARTE 1: La bailarina es grande y maravillosa
En un principio, escenario vacío y empieza a sonar una música orquestada fuerte y rápida con ritmo (por ejemplo) malfuf de base y de repente la bailarina entra desplazándose gracilmente por toda la escena. Radiante y elegante mostrándose y presentándose a la audiencia, quizá con un velo o con algún elemento más novedoso.
La música cambia y pasa por un montón de estilos y ritmos diferentes para cerrar con la misma melodía que empezó. Esto señoras y señores es un Megancé (del que hablaremos en detalle en otro post).
PARTE 2: La bailarina es sentimiento y pasión.
Después de la entrada triunfal y causar ese ¡WOW! del público llega el momento de bailar más pausadamente y disfrutar la música. Quizá con un baladi o algo estilo tarab o ¿por qué no? una canción romántica. Un taqsim bien bonito en algún momento de la pieza es de mucha ayuda.
PD: Si escoges canción con letra intenta buscarla para que tu interpretación sea más acertada. No es plan de bailar una canción de desamor trágico con una sonrisa enorme ¿verdad?
PARTE 3: La bailarina es divertida y folclórica
En este punto seguramente tengas al público contigo y llega el momento de pasárselo bien, un shaabi coqueto o un saidi con bastón alegre son una buena opción.
La cosa es disfutar y alegrar el ambiente. ¡Arriba la fiesta!
PARTE 4: La bailarina es técnica y fuerte.
Ya llevamos un buen rato bailando y llega el momento (que yo más disfruto) la percusión. Ahora sólo estáis el ritmo y vosotros, es el momento de sorprender con tu técnica de cadera,tus shimmies y tu sentido del ritmo.
Una vez terminada la percusión fuerte e intensa y de escuchar la ovación del público, se despide la bailarina con la misma melodía orquestada y alegre con la que empezó. Y así, termina la función.
Esta estructura por supuesto es totalmente flexible y modificable al gusto del intérprete o de los requisitos del evento. ¿Vosotros qué opináis? ¿Cómo soléis hacer vuestros espectáculos? Si eres espectador, ¿qué te gusta encontrar?
Sahra Hayal
